VIII. Amar

Rompí en mil pedazos aquella noche en la que decidimos poner fin a lo nuestro.
Olvidé aquello por lo que tantos años habíamos luchado, juntos.
Toda mi vida se convirtió en mil pedazos que sabría que nunca podrían volver a unirse.
Imaginé contigo el mayor de los futuros, y acababa de perderlo todo.
Abrí mi corazón sin temer a nada, porque cuando amas de verdad, nada importa.

VII. Tu olor

Hoy me ha venido tu olor a mi cabeza.
He recordado aquellas largas tardes en Barcelona, donde caminábamos a contra corriente al paso de la gente, donde nuestro amor se hizo tan fuerte que podríamos haber hecho estallar cualquier cosa sin necesitar fuego.
(ya lo teníamos nosotras).

VI. Recuerdos.

Un recuerdo de su pelo alborotado al compás del viento, mientras se asomaba por la mañana a la ventana mientras yo despertaba. El olor a café, tostadas recién echas y el sonido de su voz dándome los buenos días, contándonos las cosas que haríamos y despidiéndonos con un largo beso, ese que tendría que permanecer conmigo hasta que llegase la tarde y volviésemos a vernos. Y su casa, esa que recuerdo como si hubiera estado años viviendo, con esas largas escaleras que me acompañaban hasta el cielo entre sus piernas. Y sus manías, su orden y su perfección que tanto me molestaba y que tanto me gustaba de ella. Y es que hay amores que cuestan de olvidar, que dejan un sabor agridulce y sensaciones que se quedan marcadas en la piel. Marcadas, como un tatuaje que ya no se puede borrar.

V. Vacío.

De repente desaparece todo aquello que creías eterno.
Apareces sin dirección alguna, caminando vagamente al compás del reloj.
Miras a tu alrededor;
           en el fondo no ha cambiado nada,
pero dentro de ti todo está mas oscuro, disipado.
Te ves entre la multitud y ni te reconoces entre tanto desconocido.

IV. Contigo.

Contigo aprendí lo que no era el amor. Descubrí, que la obsesión era producto de aquellas cosas que nunca habías tenido. Que el amor no es amor cuando consiste en atar de pies y manos a alguien por miedo a que se vaya. 
Que huir es de cobardes o no.
Que el peor sentimiento que se puede tener es el de estar solo, cuando estás rodeado de gente que no te aporta lo mismo que tu. Que la simpleza está en las cosas pequeñas, y cuando piensas en grande casi nunca sale. Que hablar del pasado es malo, pero del futuro es peor. No sabes si un día aparecerá una piedra por el camino y tropezarás; o mejor aún,
que al intentar esquivarla encuentres un camino mejor. 
El presente es lo único que tenemos, y nadie sabe aferrarse a ello.
Que si todos dejáramos de buscar, lo más mínimo sería un regalo para nuestros ojos.
Sabía que no eras tu porque desde que empecé contigo... dejé de escribir.

III. Mi yo interior.

Te ata, te aprieta, te coge con fuerzas y te deja caer en medio de la nada. Es abrumador. Notar cómo algo que nunca habia tenido cabida en tu cabeza, ahora ocupa casi el 90% de ella.

II. ¿Qué es para ti el amor?

Para mí el amor es saber expresarse sin hablar, solo con miradas. Es sentir que eres parte de otra persona, y que tienes parte de otra persona en ti. Es aprender a escuchar, entender y saber vivir y convivir al lado de alguien. Querer es hacer aflorar miles de sentimientos en ti. Es querer luchar por alguien. Es instruirte en ti misma para valorar, crecer y mantener cerca a alguien que vino en un día concreto y se quedó impregnado en ti. El amor no es fácil. Si una persona no suelta cuerda mientras otra la tensa, se rompe. Si el amor lo comparas con un cristal, y este se rompe, jamás lograrás encontrar todos los trozitos para que quede como antes. Al amor hay que saber cuidarlo, dar sin esperar nada a cambio. El amor no tiene etiquetas, ni normas ni leyes que acatar.